jueves, 15 de julio de 2010

Cuidado de la piel.

Todo buen maquillaje depende no solo de la calidad del producto utilizado. El final de un buen trabajo y que sea duradero se basa simple y llanamente en tener una buena base desde donde trabajar.Con base no me refiero al producto de maquillaje sino a la piel.
No podemos pedir que nuestro maquillaje que nos ha costado trabajo crear dure lo mismo en una piel mal cuidada y deshidratada que en una limpia, hidratada y con su correcta exfoliación semanal.
Siempre comparo la imagen de un rostro bellamente maquillado y con un perfecto acabado, con una obra de arte. Todo buen cuadro que sea creado para deleitarnos por años y siglos debe de estar creado desde una base -en este caso el lienzo- de calidad y cuidar su preparación para poder comenzar a pintar sobre ella. Hay que comenzar con un lienzo cuyo tejido sea de buena calidad, continuamos con una capa base y a partir de ahí solo queda que el artista sea bueno y su obra llegue al corazón del público.
Con todo esto trato de mostrar la importancia que en un maquillaje bien acabado tiene el hecho de cuidar la piel de nuestro rostro.Nunca olvidando el cuidado de todo nuestro cuerpo. Parece una obviedad pero mucha gente olvida que nuestro órgano más grande y que más nos protege de las agresiones del ambiente... es nuestra piel. En ella existen millones de terminasiones nerviosas, cantidad de poros que permiten la transpiración... y con todo, en si, es uno de los órganos al que menos importancia le solemos dar.
El simple hecho de mantenerla limpia, con baños o duchas diarias, significa dejarla respirar.Eliminando con la limpieza la suciedad del día a día, como puede ser la polución del medio ambiente, el sudor que se nos queda pegado... Otra es el exfoliarla para quitar las células muertas que se desprendes de nuestra piel.Es un órgano que se regenera continuamente. Lo apreciamos claramente cuando nos hacemos una herida o nos quemamos a causa del sol. La piel es nuestro caparazón que protege el resto de nuestro organismo.
Debemos darle la importancia que merece, no solo estéticamente, sino a nivel orgánico. A parte de la limpieza, la debemos hidratar desde dentro y por fuera.Desde dentro tomando mucho líquido,no solo agua si no fruta, verdura...de esta manera no solo aportaremos agua sino muchos otros nutrientes y vitaminas que necesita para estar radiante y tersa. Por fuera la hidrataremos con cremas o aceites específicos, aunque el aceite de oliva y almendras son aceites naturales y que suele aceptar todo tipo de pieles.
La piel del rostro es más sensible a las agresiones del tiempo y del ambiente y es donde se refleja nuestro estado físico. A ella le debemos dar un poco más de atención. Al igual que el resto de nuestra piel necesita una limpieza diaria, exfoliación semanal e hidratación. Pero además, una vez al mes debemos limpiar los poros de manera que eliminemos pequeños barritos y espinillas. Si tienes nociones puedes hacerlo tú misma, si no es mejor una esteticista. Esto conlleva unos pasos para hacerlo bien y no dañar la piel y si no sabes déjalo en manos de profesionales.
Si con todo esto, aún tienes algún tipo de problema en la piel, consulta con un dermatólogo.Ofrécele a tu piel la importancia que merece y cuando la tengas preparada ya podemos comenzar a darle mil colores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario